Qué difícil es aceptar que hay cosas en la vida que no nos gusta hacer!
Somos seres humanos y si bien sabemos que en esta vida hay muchas cosas que nos van a doler, disgustar, enfadar, rechazar, alterar y más, gastamos mucha energía tratando de evitarnos dolores y sufrimientos. Algunos de ellos se nos imponen pero estamos hablando de los que generalmente creamos.
Nuestra imaginación, que nos hace creativos y nos permite suponer, buscar alternativas y adaptarnos a situaciones, en otras ocasiones se torna poco flexible y genera malestar y sufrimiento.
Cuando imagina males incalculables, cuando logra fantasear la catástrofe más grande del mundo, cuando supone que no tenemos ningún recurso y seremos los seres más infelices del mundo. Esto se da cuando la realidad se divide en blanco y negro, vida o muerte, alegría o tristeza, salud o enfermedad.
En estos tiempos más que en otros se escucha: “me divierte o me aburre”, “pasarla bien o pasarla mal”.
Es posible viajar mejor, es posible atravesar una enfermedad con mayor o menor dolor, es posible rendir un examen más o menos nervioso, pero para ello hay que aceptar que todo lo que hacemos puede traer un cierto malestar, dolor, sufrimiento o incomodidad.
Poder usar bien la información acerca de todo lo que involucra el viajar en avión, ayuda y mucho. El auto conocimiento y reconocerse ansioso, ayuda y mucho.
“Exigir no sufrir o tener que sentirse bien para poder vivir no se ajusta a lo que la vida realmente ofrece, en tanto que el malestar psicológico es parte circunstancial de la vida, y acogerse a la búsqueda de la evitación del sufrimiento , como el único objetivo en la vida es una elección restrictiva que puede resultar destructiva”
Terapia de aceptación y compromiso. Hayes , pp 38.